El Congreso de la FIFA refrescó el mandato como presidente al suizo Gianni Infantino, único candidato a un puesto al que logró por primera vez en febrero de 2016 y en el que estará hasta el 2023.
«Amo el fútbol y trabajo duro. Me comprometo a seguir amándolo y trabajando duro. Con vosotros y para vosotros, por y para el fútbol. ¿Qué va a pasar en estos próximos cuatro años? Habrá que seguir trabajando», expresó en su discurso.
Infantino, de 49 años, se comprometió también a modificar el sistema de transferencias, a hacer inclusive una «revolución al respecto»: «Lo precisamos. Es una cuestión de imagen del fútbol», indicó.
El dirigente suizo abogó igualmente por ahondar en el rol social de su organismo, invertir en educación y aprovechar el impulso del Mundial de fútbol femenino, que emprende mañana en París, para reforzar ese deporte, «que es un deporte en sí mismo, y no un copia y pega del masculino».
Infantino reflexionó que la Fifa «es sinónimo en la actualidad de modernidad, unidad o liderazgo» y se marcó entre sus próximos objetivos apostar por la transformación digital.
«Viva el fútbol y viva la Fifa», concluyó en un discurso en el que, contento, agradeció la confianza otorgada por las distintas federaciones: «Gracias a todos los que me quieren y a los que me odian. Hoy amo a todo el mundo», bromeó dando cita a los congregados para el Congreso del año que viene en Adís Abeba.











