Mientras todas la miradas se centraban en el incendio de la catedral parisina Notre-Dame, construida en el siglo XII, otro incendio pasaba inadvertido en otra parte del mundo, pues en la noche de este lunes también se incendió la mezquita de Al-Aqsa en Jerusalén, donde resultó quemado el techo de la sala de rezos del edificio.
La mezquita de Al-Aqsa en Jersusalén ardió al mismo tiempo que Notre-Dame. El considerado tercer lugar más sagrado para el Islam se incendió en la sala de rezos mientras Notre-Dame ardía en París.
La agencia palestina de noticias citó que el incendio el incendio se inició fuera, y se propagó al tejado de la sala de rezos, pero la brigada del Wafq Islámico de Jerusalén consiguió controlarlo de manera satisfactoria.
Mientras la mezquita ardía en fuego, el presidente palestino Mahmoud Abbas expresaba sus condolencias por el incendio ocurrido en la catedral parisina. «La presidencia confirma su solidaridad con nuestros amigos en Francia por este incidente», expresó en el comunicado.
Extraoficialmente se conoció que el incendio en la mezquita inició en el patio del edificio, y podría haber sido provocado por varios niños que se encontraban en la zona.
